¿Dispuesto a vivir?

Vivir significa enfrentarse a la vida. Reir, discutir, sentir. Enfadarse y alegrarse. Opinar. Aceptar y rechazar. Vivir comprende un término base: luchar. Desear no morir. Querer seguir adelante siempre. Vivir significa querer vivir bien. No dejar que el tiempo pase y morir deprimido. Intentemos hacer que nuestra vida sea mejor. Hablemos... No sé, ¿de vivir?

martes, 4 de octubre de 2011

Elijo vivir



Cuando menos te lo esperas, la vida gira y todo coge un nuevo significado. Nuestra existencia se basa en decisiones. Nuestro estado de ánimo, en general, se basa en como decidamos estar.

Tras una época en la que me costaba no sonreír, he pasado a una en la que me cuesta el no llorar. Sin embargo me he cansado y hace unos días, por distintos factores, decidí ponerle un punto y final. Estoy hastiado de ponerme trabas en la vida, de impedirme sonreír, de impedirme avanzar. Cuando las lágrimas se convierten en un hábito y el estar de mal humor en una costumbre, es cuando realmente te das cuenta de que estás haciendo algo mal y debes cambiarlo o aceptarlo.

Quizás mis últimos meses se han basado en la táctica de un clavo saca otro clavo. El caso es que he descubierto algo. Un clavo no saca otro clavo. Somos nosotros, cada individuo, los que decidimos eso. A día de hoy yo he sacado el clavo. He sido muy idiota durante mucho tiempo, y he decidido que ya está. No voy a buscar ningún clavo para sacar el anterior, no, porque ya no está, a base de golpes yo he sacado ese clavo. Me han sangrado las manos, muchísimo, pero ya está fuera.

Cuando tocas fondo solo puedes esperar salir a flote, y yo no voy a esperar. El destruirme solo ha hecho una cosa: Que me quiera más, que me acepte más como soy y algo que me ayuda en gran manera, que me valore mucho más. Estoy cansado que la gente me prejuzgue sin siquiera hablarme, y que la gente que cree conocerme también lo haga. No me importa el qué dirán o el que puedan pensar, ahora solo me importa ser feliz.

Ahora vuelvo a sonreír. Nuevas ilusiones llenan mi vida y estoy permitiendo que ilusiones ajenas también me empujen. No voy a seguir llorando, no voy a seguir destruyéndome cada día más, no voy a permitir echarme de menos. Soy Dani, el de siempre, y he vuelto, ésta vez con muchas lecciones aprendidas que me van a ayudar a ser más feliz, solo, o con otros.

No hay mal que cien años dure a menos que decidas que así sea. Ha pasado un tiempo y a día de hoy ya he decidido: Elijo vivir.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola !

Me alegra leerte un poco mejor y mas optimista , que tu dirás realista pero me da igual xD. El punto es que sí muchas veces la vida es dura y tu has pasado por muuuchas cosas pero cada que te pones de pie nuevamente lo haces corregido y aumentado y eso me queda mas que claro.

Me da gusto saber que estas aunque sea algo mejor.

Saludos!

sannoro dijo...

Oye, me alegro muchísimo de la decisión que has tomado. Es una decisión difícil (aunque a simple vista parezca fácil eligir vivir, no lo es tanto) pero si ya la has tomado, verás como ahora vas a empezar a ser tú otra vez.

Sigue así, y me gusta más ver estas entradas optimistas que las otras más tristonas, :)

Xenariana dijo...

Bueno, menos mal que quedaba un resquicio del otro tú ahí dentro para seguir dando leña, guapo, lo cierto es que se te echa de menos "una jartá". A ver si te emborrachas pronto y así me llamas para hablar un rato xDD
En algún lugar de blogspot hay mil noches sin luna a la espera de ser colmadas de nuevas historias ¿no te entristece dejar solo a ese cielo viudo de luna y estrellas?