¿Dispuesto a vivir?

Vivir significa enfrentarse a la vida. Reir, discutir, sentir. Enfadarse y alegrarse. Opinar. Aceptar y rechazar. Vivir comprende un término base: luchar. Desear no morir. Querer seguir adelante siempre. Vivir significa querer vivir bien. No dejar que el tiempo pase y morir deprimido. Intentemos hacer que nuestra vida sea mejor. Hablemos... No sé, ¿de vivir?

domingo, 9 de febrero de 2014

No permitas echarte de menos




La vida cambia, las cosas a veces van a mejor y otras, por suerte o desgracia, van a peor. En ocasiones es una suerte que las cosas vayan mal, te ayuda a que puedas descubrir la verdad, a ver qué es lo que hay mal en ti y en tu entorno. No quiere decir que haya algo que no pueda arreglarse, sino que se trata de poder observar con atención que has dejado de lado o a que has pasado a prestarle una menor atención de ti y, a partir de ahí, intentar remediarlo. Muchas veces nos esforzamos por conseguir cosas absurdas que no necesitamos y malgastar energías en ello nos puede resultar en unos dolores de cabeza que no nos merecemos.

Al final del día estamos solos. Partiendo de esta regla creo que lo adecuado es que hagamos que nuestra vida gire en el hecho de sentirnos bien, de ser un poquito más felices. No se trata de tirarse a los brazos de doscientas personas que no conocemos para llenar ese vacío, no, se trata de que nos encontremos, nos conozcamos y, cuando llegue la noche, podamos sonreír. Porque nos tenemos a nosotros y hemos sido fieles a los principios que hemos construido, como muy pocas personas pueden lograr. Quizás conseguir esto sea complicado, de hecho es una tarea muy difícil pero, como tal, no es imposible.

Conócete, alégrate de ser quien eres, se feliz mostrándote a los demás como quieres y, ante todo, aleja de ti todo lo negativo. A lo largo de tu vida habrá personas que por su carácter harán que tus energías, tu salud física e incluso tu estabilidad mental se tambaleen. No las tengas cerca, aléjalas. Mira a tu alrededor y busca a todas aquellas personas que te hagan feliz, que con solo una frase te hagan sonreír. Quizás sean pocas, pero esas son las que tienes que valorar y luchar por mantener.

Cuando estés solo, no pienses en lo malo, no pienses en los problemas ni en aquellas personas que, sea a propósito o no, te hagan daño. No. Piensa en las cosas buenas, en aquellas personas que te hacen la vida más llevadera. Quédate con lo que te dan y asegúrate de devolvérselo con creces. Pues la vida pasa e irremediablemente tenemos que basarnos en los pequeños detalles para seguir adelante.

La vida es complicada, si fuera fácil al salir a la calle todos sonreirían y, si miras a la gente de tu alrededor, esas personas son la excepción. Así que, ¿Por qué no intentar sonreír? Aprende a quererte y, al final del día, cuando estés solo, sonríete. No permitas echarte de menos.